Esperanzah

San Cosme y San Damián es un barrio de obreros que se empezó a construir a partir de la década de los 60, con la llegada de la población que vivía en las barracas de Montjuïc (andaluces, castellano manchegos, extremeños, catalanes…). Desde el principio, en la construcción del barrio, han convivido payos y gitanos Y actualmente en el barrio conviven muchas más culturas (magrebíes, salvadoreños, colombianos, paquistaníes, rumanos… .) El barrio ha sufrido muchas remodelaciones, tanto en su estructura urbanística, como a nivel humano.

Es un barrio homogéneo, pero se pueden diferenciar las 7 fases de viviendas en las que está construido. A nivel de infraestructuras el barrio cuenta con dos colegios y 2 institutos, donde no sólo hay inscritos niños/as y jóvenes del barrio, sino de todo el municipio. El Julio Méndez, un polideportivo de carácter público, dos comisarías, una de los mossos d’esquadra, y otra de la policía local, una base de bomberos y el Cap Pujol i Capsada. A pesar de los esfuerzos por normalizar la imagen del barrio por parte de los vecinos y del Ayuntamiento del Prat de Llobregat, municipio al cual pertenece el barrio de San Cosme, éste siempre ha sido un barrio muy estigmatizado por la población en general.

Nuestro barrio, el de Sant Cosme es un barrio de trabajadores, como otro cualquiera, un barrio donde muchas personas, administraciones y entidades trabajan sin descanso para mejorarlo. En todos los barrios hay problemas, este no es una excepción, pero no son mayores que los que puede haber en otros barrios de nuestro entorno. Pese a todo, Sant Cosme, sigue siendo un barrio que se conoce más por su pasado, que no por su presente y por su futuro. El Sant Cosme de la gente que trabaja por un barrio mejor, en el de les Dones Sàvies, el de su espectacular Pesebre viviente, el de las sopas y las culturas del mundo, el que el propio Manu Chao se refirió como el lugar dónde estaban los reyes de la rumba, es un barrio que trabaja para mejor y que mira al futuro con las ideas claras.

La cultura en el barrio de San Cosme ha servido para romper estigmas y barreras. Un gran momento fue el concierto y la semana de convivencia de Manu Chao en nuestro barrio. Algo que será siempre recordado y que además ha servido para que muchos periodistas y curiosos se acercaran al barrio y comprobaran de primera mano que este no es el Sant Cosme que les habían explicado. Sencillamente, es mucho mejor. La cultura y muestras como el Festival Esperanzah!, han servido para que en San Cosme pasen cosas que nadie apostaba por que pasaran y para que podamos mostrar con orgullo que somos de San Cosme.